La policía le prohibe exponer dibujos "con humor" en su puesto de trabajo, con la amenaza de retirarle su permiso de retratista.
El pequeño grupo de caricaturistas que lo ha estado denunciando los últimos 5 años consigue así afianzar su Monopolio sobre los dibujos baratos, aún cuando una mayoría del colectivo de dibujantes ha estado pidiendo en repetidas ocasiones que no se diferencien las especialidades de retrato y caricatura.
El argumento del ayuntamiento siempre ha sido que "no cambian nada porque pronto van a reformarlo todo". (leer más...)